En esta semana el Ayuntamiento ha hecho entrega al Banco de Alimentos de Sevilla de 500.000 euros en concepto de subvención nominativa.
Gracias a esta subvención, la más importante que ha recibido la institución en los 18 años que tiene, el Banco de Alimentos podrá incrementar en un 30% su oferta alimenticia a las familias más desfavorecidas de la capital, lo que significa unas 6.000 personas más o atender mejor a las 6.000 personas a las que ya atienden. Así el Banco de Alimentos podrá implementar su proyecto solidario en zonas de especial necesidad que ha localizado en los polígonos Norte y Sur, Torreblanca, Tres Barrios-Amate, el Tardón o el Cerezo.
También hemos sabido que Cáritas de Sevilla ha visto triplicada la demanda asistencial, y que sólo el año pasado se dio asistencia a 21.683 familias, lo que supone un incremento del 17,2% respecto al 2011. El presidente de Cáritas Diocesana, Felipe Cecilia, mientras presentó la memoria de 2012 no ha querido olvidar la importante contribución de los voluntarios, y la contribución de los sevillanos, que permiten esta labor asistencial a 21.683 familias y 63.457 personas.
Otro dato interesante es que se ha registrado un descenso del 3,3% del número de familias inmigrantes atendidas, pero su situación de pobreza, sin embargo, ha registrado un empeoramiento por sus condiciones de precariedad laboral y social.
informe
Informe de Cáritas sobre la pobreza en Andalucía
El porcentaje de personas bajo el umbral de la pobreza en Andalucía es del 31,68 por ciento, según el informe titulado: Pobreza y privación en Andalucía y España: el impacto de la Gran Recesión, y elaborado por Cáritas. Andalucía se convierte en la cuarta comunidad más pobre del país tras Canarias, Extremadura, y Castilla-La Mancha.
A pesar de ser la cuarta, en tan desagradable ranking, es la región con mayor intensidad de la pobreza, lo que implica que los pobres andaluces tienen una diferencia mayor con respecto a la media que en el resto de comunidades autónomas.
En concreto el informe ha sido elaborado por el Observatorio de Investigación sobre Pobreza y Exclusión en la Comunidad Valenciana, de la Universidad Cardenal Herrera, en colaboración con Cáritas y la Fundación Foessa. Sus autores son Eduardo Esteve Pérez, Enrique Lluch Fechina y Jesús Pérez Mayo.
Se considera bajo el umbral de la pobreza, en 2011 y para un hogar con 1 sola persona era de 7.500 euros al año, y para una familia de 4 miembros de 15.768. La intensidad es la distancia a la que las personas se encuentran de dicho umbral, y en el caso de Andalucía es de unos 1.000 euros anuales de media.
Otro de los datos que se distinguen es que los niños están más afectados por la incidencia de la crisis, uno de cada tres niños están en riesgo de pobreza, “un dato importante para el futuro de esta región y de nuestro país, porque si un niño vive en una familia pobre tiene más dificultada para desarrollar sus dificultades”, precisa Pérez Mayo.
Por otro lado, el nivel de privación en Andalucía es superior al que se da en España, destacando la imposibilidad de permitirse unas vacaciones pagadas fuera de casa al menos una vez al año, o el porcentaje de hogares que no pueden hacer frente a los gastos imprevistos.