Ya hemos hablado en más de una ocasión de que Sevilla ha sido el escenario en el que importantes compositores, como Mozart o Bizet han situado a los personajes de sus óperas, de ahí que se lanzara la iniciativa Sevilla de Ópera, una propuesta de la delegación de turismo del Ayuntamiento. Pues bien durante los días 12 y 13 se celebra Día Internacional de la Ópera, realmente este día es el día 8, pero se quiere aprovechar el fin de semana.
Para estos días se ha previsto dos jornadas de puertas abiertas del Teatro Maestranza, con una recreación teatral en el que veremos representados a los personajes de Don Juan, Carmen y Fígaro. También se interpretarán arias de óperas por parte del coro del teatro y se promocionará la tarjeta de fidelización Fidelio.
Como complemento a esta jornada de puertas abiertas, la mañana del sábado y del domingo se celebrará una gymkana temática sobre la ópera Carmen, en la que los participantes tendrán que contestar preguntas basadas en el itinerario que se ha creado para esta acción y que se podrá seguir mediante un sistema de audioguía. El premio de la gymkana es dos abonos para el Teatro Maestranza para la próxima temporada, además de la entrada gratuita a la representación de la ópera para niños.
Por otra parte, a los 37 establecimientos identificados dentro de Sevilla de Ópera se les ha entregado las placas identificativas de cerámica realizadas por La Cartuja Pickman, estas son señales direccionales que indican los distintos itinerarios. También se pondrán en el suelo y algunos mupis informativo.
Mozart
El mito de Don Juan
La figura del Don Juan fue creada por Tirso de Molina en El burlador de Sevilla y más tarde recreada por José Zorrilla en el romanticismo con Don Juan Tenorio ha sido, sin duda, uno de los personajes más repetidos en la cultura europea. Mozart lo recreó en Don Giovanni de Mozart, Richard Strauss compuso un poema sinfónico, además están las versiones del Don Juan de Molière o el de Lord Byron. Evidentemente hay un Don Juan, en el imaginario popular antes de cobrar cuerpo literario, de no haber sido así el mito no hubiera pervivido.
Don Juan representa la absoluta ruptura con lo establecido y las normas. En El burlador de Sevilla acaba trágicamente, con un Don Juan abrasado por el fuego del infierno, el Don Juan de Zorrilla muere tras arrepentirse, redimido por el amor. Su conducta ha sido errónea y es justamente castigada.
El don Juan de Molière es más hipócrita de todos, algo típico en el autor, su criado, que no le es del todo fiel hace el papel de avisador. Finalmente don Juan acabará en el infierno. Ya no representa al pecador, sino al rebelde social, al librepensador de la sociedad francesa del siglo XVIII.
El romántico Lord Byron construye en su Don Juan un poema satírico, con una trama y una vida inacabada, su estructura tiene una apariencia desordenada y abierta, como si el autor hubiera pretendido continuarla hasta el infinito, dejándose llevar por el libre vuelo de su mente.